Boda en Hacienda de Campoamor
Irene y Marcos dieron el paso adelante y se casaron en Algete, celebrando su Boda en Hacienda de Campoamor, un complejo situado a escasos kilómetros de Madrid, por la carretera de Burgos.
Había pasado muchas veces por su puerta, pero no había estado nunca como fotógrafo de bodas.
Me preguntaba cuándo haría fotos de Boda en Hacienda de Campoamor. Y ese día llegó de la forma menos esperada. Conocí a Irene y Marcos a través de un compañero fotógrafo de eventos deportivos, Nano Martínez Espinosa. Hemos coincidido varias veces como fotógrafo en el Circuito del Jarama-RACE. Así que Marcos me llamó de parte de Nano. Cuando les conocí en la primera entrevista que tuvimos, vi a una pareja con la ilusión propia de los que están preparando su boda. Igualmente vi también un brillo especial salía de sus miradas, en sus gestos. A los pocos días me dijeron que sería su fotógrafo de boda.
Hacienda de Campoamor.
La ceremonia se celebró allí mismo. Esta vez no hubo fotos de preparativos previos de novios. Habían preferido vestirse sin la cámara de fotos delante, así que les esperé directamente en la Finca Hacienda de Campoamor. La ceremonia transcurrió con la emoción desbordada del novio que no pudo contener las lágrimas en varias ocasiones. Tras la ceremonia hicimos un breve reportaje de pareja ya con la noche caída; y ello a pesar de ser primeros de septiembre. Entre el retraso del comienzo y las nubes negras de esa tarde, nos quedamos sin luz antes de lo previsto. Así ocurre a veces en los reportajes de boda, no siempre ocurre lo planeado.
Una sesión de fotos de pareja al anochecer…
No habíamos hecho reportaje de preboda, y se notó sobre todo al principio de la sesión. Siempre digo lo mismo, la preboda sirve para que haya un feeling especial entre novios y el fotógrafo de bodas. Por esa razón intento hacerla siempre que puedo. Sirve también para enseñar a los novios a ponerse delante de la cámara de fotos y que el día clave, o sea, la boda, salga todo muy natural, muy fresco y fluido. Pero en fin, en esta ocasión no fue posible, así que hicimos la sesión de pareja con el reto de no haber estado antes junto a ellos.
En realidad no me fue difícil conectar con ellos pues había tanto amor entre ellos que las emociones y los sentimientos aparecían por sí solos en cada abrazo, en cada mirada,…..
Después, ya sabéis, vino el cóctel, la cena y el divertido baile con entrega de ramo de novia incluida. Y también un divertido photocall. Todos lo pasamos estupendamente. Disfruté mucho con esta boda en Hacienda de Campoamor. Sólo me queda desearles a Irene y Marcos una feliz vida juntos y que nunca pierdan la chispa del amor que llevan dentro. Gracias de nuevo por dejarme ser vuestro fotógrafo de boda. ¡Hasta pronto, un fuerte abrazo!
Pepe Valenciano – fotógrafo de bodas en Madrid
Boda en Hacienda de Campoamor
«Los besos son como pepitas de oro o de plata, halladas en tierra y sin un gran valor,
pero preciosas porque revelan que cerca hay una mina»
George Villers (1592 – 1628)