Boda en la playa.

Boda en la playa

Tras el reportaje de preboda hípica en Madrid llegó el gran día para Cris y Pablo. Su boda la habían preparado con esmero. Eligieron para ello hacer una boda en la playa del Complejo La Cigüeña. Un pequeño paraíso a las afueras de Madrid.

BODA EN LA PLAYA DEL COMPLEJO LA CIGÜEÑA.

Boda en la playa

La Finca La Cigüeña, tiene todo lo necesario para que los novios e invitados disfruten de lo lindo. Desde sus bungalows donde alojarse, pasando por sus carpas para comer o cenar, y obviamente, distintos lugares para la ceremonia. Uno de ellos es su playa, con su terraza a lo «chill out». Para un fotógrafo de bodas es un lugar ideal para sacar todo tipo de fotos.

Boda en la playa

FOTOS DE LOS PREPARATIVOS DE LOS NOVIOS.

Antes del momento de la boda en la playa, y como manda la tradición, hicimos las fotos de los preparativos de los novios. Primeramente le tocó el turno al novio. Fueron momentos emotivos, porque sus padres se implicaron ayudando al novio. Siempre digo que estas fotos hay que hacerlas siempre que se pueda, y ello porque surgen imágenes emotivas, miradas, y alguna que otra lagrimilla…

Boda en la playa

Después del novio, tocaba la novia. Cris estaba reluciente, emocionada. Su gente llenaba la casa, mientras su madre la ayudaba en todo. La novia se ponía guapa para el gran momento.

Boda en la playa

UNA CEREMONIA SINGULAR.

Preparar esta boda en la playa de La Cigüeña, fue un acierto. El lago al atardecer ofrecía una imagen cálida. Los invitados iban llegando haciendo un paseillo hasta bajar hasta el embarcadero, donde se había acondicionado el lugar para la ceremonia.

Boda en la playa

La entrada de novios fue espectacular. Primero Pablo, agarrado a su madre. Miradas entre ellos, y momentos únicos captados por mis Nikon. Para mí, son fotos que me encantan. Porque lo mío es fotografía emocional. Y esos momentos únicos son parte de ello.

Boda en la playa

Después llegó Cris, la novia. Todos abajo miraban hacia arriba. Y de todos ellos, el novio la esperaba emocionado. Verdaderamente, esta boda en la playa de La Cigüeña estaba llena de emociones desde el principio.

Boda en la playa

El sol iba cayendo, la luz era cálida. La ceremonia de la boda en la playa fue emotiva desde el inicio. Los distintos discursos dirigidos a los novios emocionaban a todos.

Boda en la playa

Para la salida de novios animé a los invitados a hacer un paseíllo mientras los novios iban chocando manos, con el confeti cayendo sobre ellos.

Boda en la playa

REPORTAJE DE PAREJA POR LA PLAYA Y EMBARCADERO.

Boda en la playa

Finalizada la ceremonia de la boda en la playa, hicimos un reportaje de pareja. Los novios, ya relajados, se dejaron llevar por lo que les inspiraba el lugar. Y  dieron rienda suelta a todo el amor que hay en ellos.

Boda en la playa

Como habíamos hecho las fotos de preboda, fue todo más fácil. Ye me conocían, y sabían lo que tenían que hacer. En unas fotos de pareja tras la ceremonia, se nota cuando previamente ha habido sesión de fotos de preboda. Mi consejo a los novios es que la hagan. Además, te puedes encontrar con la grata sorpresa de que los novios usen fotos de preboda para decorar el jardín del cóctel, como ocurrió en este caso.

Boda en la playa

UN BAILE PREPARADO.

Boda en la playa

Antes de llegar al cóctel, nos paramos en la pérgola de entrada al Complejo La Cigüeña, donde los novios pudieron marcarse un baile de lo más romántico.

Boda en la playa del Complejo La Cigüeña.

Ya en la cena, siguieron las emociones. La gente se lo pasó estupendamente. Y llegó el momento  del baile. Los novios se marcaron un bailecito que habían preparado con esmero. Fue divertido.

Boda en la playa

Sólo me queda dar las gracias a Cris y Pablo por dejarme contar con imágenes su historia de amor culminada en esta boda en la playa que he compartido con vosotros.

«Amad. Es el único bien que hay en la vida»

George Sand (1804-1876)